Tal y como os contamos la semana pasada, la labor de una planta de tratamiento o gestión de residuos RCD no se trata solamente de una cuestión básica de economía, en la que el reciclado de los residuos ayuda a reutilizar los materiales contribuyendo a abaratar los costes posteriores de la construcción.
Pero, ¿quieres saber más sobre este tema? Pues hoy en Transanc te lo contamos todo.
Los residuos de construcción y demolición comprenden los escombros generados durante ese tipo de actividades industriales. Cada vez que se construyen, renuevan o demuelen edificios y estructuras de ingeniería civil, se genera una cantidad considerable de residuos. Estos desechos a menudo incluyen una variedad de materiales dependiendo de cómo y dónde se generaron, incluidos concreto, metales, ladrillos, vidrio, plásticos, orgánicos, etc.
La construcción y la demolición, si no se gestionan adecuadamente, pueden ser una gran amenaza urbana. Los desechos RCD son una fuente importante de contaminación del aire. Los vertidos ilegales desenfrenados en lagos y ríos también están destruyendo nuestros ecosistemas y contaminando nuestra agua.
Los avanzados sistemas de procesamiento de desechos de RCD ayudan a convertir estos desechos en arena reciclada y agregados, como los áridos reciclados, que tienen una variedad de usos y aplicaciones de construcción. La correcta gestión de una planta de tratamiento de residuos tiene diversos efectos positivos: